El ayuntamiento fue construido entre 1402 y 1455. Hoy en día es el único testigo de arquitectura medieval de la plaza.
La torre de estilo gótico de 96 metros de altura tiene en su extremo una estatua del arcángel san Miguel, patrón de Bruselas, venciendo al Diablo.
Cabe destacar la asimetría del edificio, ya que la torre no se encuentra exactamente en el medio del edificio y la parte izquierda es diferente de la parte derecha. Esta asimetría puede relacionarse con un posible omnipresente simbolismo alquimista de la Grand-Place. La parte izquierda del comporta doce arcos, incluido el campanario, que representan la alquimia húmeda en doce etapas. Por su parte, el lado derecho cuenta siete arcos, contando el campanario, que simbolizan la nueva alquimia seca, en siete etapas. El número siete es de hecho enormemente representado en la arquitectura de la Grand-Place.
