Maya

Pintoresco pueblo calle que recibe al visitante con su peculiar arco de entrada. La falta de alineación y uniformidad de sus fachadas evita la monotonía y permite la obtención de magníficas perspectivas.
El característico color bermejo de la piedra procedente de las canteras de Almándoz impregna, como en el resto del valle de Baztan, su caserío.
Uno de los rincones más emblemáticos de Maya se encuentra a la entrada la localidad. Se trata de un molino rehabilitado aún hoy en funcionamiento.