Fortaleza Gormaz

El castillo de Gormaz es el más largo de Europa con 1200 metros. Se levanta sobre una empinada cresta, desde la que se dominan los extensos campos vecinos, y que permite una mejor defensa. Se construye en los primeros años de la Reconquista en el año 940, las tropas de Abderraman III dan muerte al conde de Gormaz y se dirigen a la fortaleza, donde acampan sin intentar siquiera atacarla: el castillo era inexpugnable. En su construcción se utilizaron las técnicas orientales de los Aglabitas de Bagdad y de los Túnidas de Tostat, mucho más perfectas y superiores a las que utilizaban los cristianos. Se distribuye en dos zonas claramente diferenciadas, el Alcázar, al este, protegido por recios muros y torreones, presenta una entrada acodada y amplios restos arquitectónicas inferiores entre los que sobresale un gran aljibe abovedado. El perímetro está reforzado y protegido por 28 torreones y su comunicación con el exterior se realizaría por las dos puertas Califales y las dos Portonas secundarias que todavía se reconocen.