La primera impresión de Serpa es la visión de las murallas del castillo, de las 5 puertas solo quedan dos la de Moura y la de Beja. Enclavado en la muralla del extremo Este, destaca el acueducto en arcada italiana que se extiende hasta el extremo de la muralla Sur.
El acueducto se construyó sobre las murallas, transcurre entre varias torres y la puerta de Beja. Sacaban el agua de un pozo con una noria que la elevaba hasta arriba para suministrar agua al castillo.
Del Castillo Medieval, tan sólo queda en pie la torre del homenaje. A él se accede por un trozo de gruesa muralla agrietada en la que hay una pequeña pero impresionante entrada. Se puede pasear por las almenas para disfrutar de unas magníficas vistas sobre las llanuras, el acueducto, las murallas y los tejados de la ciudad.
Vistas desde la torre del homenaje.
La iglesia del convento de San Pablo.
La ciudad está perfectamente integrada en las murallas.
En la plaza de la República encontramos la zona de terrazas, ya que es peatonal, en un extremo se encuentra el Ayuntamiento y por el otro accederemos a la torre del Reloj.
Sobre una torre romana, en 1440 se remodeló para alojar el reloj de la ciudad, es el punto más alto y por lo tanto fácil de localizar.
Alguna imagen de la ciudad.
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