En el centro de la Plaza Mayor se encuentra el Rollo o picota de Caracena, de estilo barroco. Su ubicación inicial estuvo en la placetuela de la calle La Estrella, a la que se accedía directamente desde la desaparecida puerta principal de entrada a la villa, pero en 1921, tal y como reza en la columna, se trasladó a la plaza Mayor. Funcionó como monumento conmemorativo de la autonomía administrativa de la villa, dependiendo primero directamente de la Corona y después bajo dominio señorial, y como símbolo del poder jurídico, a modo de columna de castigo donde se exponía a los malhechores a la vergüenza pública.
